La primera actuación de la Congregación de Madres de los Desamparados en Málaga fue en 1882, cuando se le cede a la Madre Petra de San José una humildísima casa en la barriada de Huelin, junto a la iglesia, donde se va a fundar el primer noviciado de la congregación y una pequeña escuela para los niños de aquel barrio de pescadores. Hoy, en ese lugar, calle Las Navas, existe una pequeña capilla donde se da culto a la Virgen del Carmen.
Ana Josefa Pérez Florido, fundadora de la Congregación, que adoptó como nombre de religión el de Madre Petra de San José, nació en la localidad malagueña de Valle de Abdalajís en 1845. Allí creó en 1873, junto con otras mujeres, Frasquita Bravo Muñoz -Madre Magdalena de San José-, su hermana Isabel Bravo Muñoz -Madre Natividad de San José- y Rafaela Conejo Muñoz -Madre Trinidad de San José, un asilo para recoger a los ancianos necesitados.
Desde su pueblo natal desarrolló una intensa labor asistencial que desembocó en la fundación de la Congregación de Madres de los Desamparados y San José de la Montaña, la principal orden femenina creada en Málaga, que cuenta con casas en varios países europeos e hispanoamericanos.
Dos años después de la creación del noviciado y escuela, en septiembre de 1884, la comunidad se instaló en el barrio de Capuchinos, donde las monjas se dedicaron especialmente al acogimiento de las niñas que se habían quedado huérfanas después del terremoto de la Navidad de ese año, que fue muy dañino en la zona de la Axarquía.
Este lugar era más acorde para el noviciado, que seguía creciendo sin parar, y en especial cuando muchos niños quedaron huérfanos o sin hogar debido al terremoto y, era necesario hacerse cargo de su sustento, cuidados y educación. Pero el convento de Capuchinos no reunía tampoco las condiciones ya que sus dependencias eran pequeñas y escasas y, además, con el terremoto, había quedado el edificio maltrecho.
Así, se acomete la construcción de un nuevo asilo a instancias del obispo Manuel Gómez-Salazar, que lo encomendaría a las Religiosas de la congregación. Su financiación provino de las limosnas recogidas como ayuda para las víctimas del terremoto y de diversas instituciones. Parte de esa suma, unos veinte mil duros, se dedicó a la construcción del mismo.
Otra señora, Doña Trinidad Grund, había recibido seis mil duros de la ex reina Doña Isabel II para una obra pía, y con permiso de dicha señora lo aplicó también para estas niñas.
Debido a algunas disensiones, al final solo se invirtió en la obra cincuenta mil pesetas, y con lo que quedó de las rentas sostuvieron el Asilo; pero convinieron en reducir el número de plazas, dejando sólo quince, correspondiendo al reverendísimo Diocesano la provisión de diez y a Doña Trinidad cinco. Por estas quince niñas y tres Hermanas que fijaron para cuidarlas les señalaron trescientas setenta y cinco pesetas mensuales.
Al fin, en 1887 las religiosas se trasladaron a su definitiva sede en la zona de Martiricos, justo al comienzo de la avenida del Hospital Civil. En este Colegio de San José de la Montaña coexistieron inicialmente un hogar para niñas huérfanas y una escuela para alumnas externas de familias necesitadas.
Aunque la titular de la Congregación es Nuestra Santísima Madre de los Desamparados se le puso al Asilo la advocación de Nuestra Señora de las Mercedes, por gratitud a la reina Doña Isabel II, en obsequio de su nieta, la infanta de este nombre.
Congregación de Madres de los Desamparados y San José de la Montaña
La Congregación de Madres de Desamparados —como se llamó primitivamente— nació el 25 de diciembre de 1880, a instancias del Obispo de Málaga, don Manuel Gómez Salazar, que incluso sugirió el nombre de la Congregación. El día de su profesión anual -2 de febrero de 1.881- cambió el nombre de Ana Josefa por el de Petra de San José.
La aprobación diocesana de la Congregación tuvo lugar el 25 de diciembre de 1881. El Decreto Pontificio de Alabanza fue dado, el 17 de julio de 1891, por el Papa León XIII. El Decreto de Aprobación fue concedido, el 30 de junio de 1908, por el Papa Pío X. Y el 14 de junio de 1958, Su Santidad Pío XII otorgó la aprobación y confirmación definitiva de la Congregación y de sus Constituciones.
Desde Málaga Madre Petra inició una incesante actividad para extender su obra de ayuda a los más desfavorecidos. Hasta su muerte, acaecida en Barcelona el 16 de agosto de 1906, fundó diez casas de la Congregación. Su fama de mujer entregada a los demás hizo que en 1932 se abriera su proceso de beatificación, que ha culminado, de momento, en su declaración como Beata en el año 1994. La Congregación de Madres de los Desamparados se extiende hoy día por España, Italia e Iberoamérica, ejerciendo su labor apostólica y social a través de centros de enseñanza, residencias de ancianos, hogares para niños y casas de espiritualidad.
Ronda
El 19 de marzo de 1884 se inauguró oficialmente en Ronda el Asilo de San José, en el que admitieron a cuarenta niñas internas, y a las clases externas gratuitas que abrieron asistían más de doscientas. Posteriormente, se estableció una clase de pago y durante mucho tiempo coexistieron los dos colegios, uno de San José y el otro de La Inmaculada., hasta 1975 que se fundieron en uno solo llamándose como en la actualidad: “La Inmaculada y San José de la Montaña”.